El intendente de Quitilipi fue sorprendido por Lázaro Terzich, quien desde su camioneta sacó un arma de fuego y lo amenazó: "Te voy a matar pendejo de mierda".
No es una historia policial más la ocurrida en Quitilipi en las últimas horas: hay una amenaza de muerte con un arma de fuego que sufrió el intendente de esa ciudad, Ariel Lovey, y un hombre que la concretó, en este caso Lázaro Terzich , hombre conocido por ser responsable del asesinato del indigenista René James Sotelo. El hecho se produjo este viernes en horas del mediodía y contó con el repudio de diversos dirigentes.
La Mesa Directiva del Comité de Circuito de la UCR Quitilipi y simpatizantes repudiaron el ataque sufrido por el presidente del Comité e Intendente municipal. "Rechazamos enfáticamente los actos que persiguen amedrentar al jefe comunal. La violencia ejercida es un peligroso precedente que atenta, no solo contra un funcionario electo por el pueblo, sino contra la democracia", señala el comunicado.
En ese sentido desde el Comité de Quitilipi se solidarizaron con Lovey y exhortaron a las autoridades públicas a garantizar su seguridad personal y la de su familia. "Dejamos en claro la preocupación de la ciudadanía con respecto a posibles hechos futuros si no se actúa de manera rápida y eficiente. Defendemos la vida en democracia" , cerraron.
En el informe policial al que accedió Diario Chaco , se detalló que Lovey salió de su domicilio a las 10:15 junto a su secretario cuando pasó por la calle una Chevrolet S10 conducida por Terzich, quien comenzó a insultarlo.
El intendente habría hecho caso omiso y continuó con la marcha, pero Terzich lo siguió y en la intersección de calles Tucumán y Salta volvió a insultarlo, esta vez con un arma de fuego al grito de "te voy a matar pendejo de mierda". Fue entonces cuando Lovey se dirigió inmediatamente hacia la comisaría.
Por esto, el intendente pedirá arresto domiciliario y "que no pueda conducir más un vehículo" porque "son muchas las enfermedades que tiene y es un riesgo".
Cabe destacar que, al momento de la detención, Terzich arrojó por arriba del muro perimetral, hacia la casa de su hermana, el arma de fuego. Sin embargo, el acompañante del hombre ingresó a la casa, tomó el arma y se la entregó a la prevención. Se trataba de un arma de fuego tipo revólver pavonado negro, marca Colt, calibre 38 largo con seis alvéolos y seis cartuchos del mismo calibre en su interior. El arma estaba sin percutar con su respectiva funda de cuero.
Cuando los agentes trasladaron a Terzich al hospital local para el informe médico, el hombre presentó una arritmia y quedó momentáneamente en observaciones.
En comunicación con este medio, Lovey contó: "En su momento, cuando yo era candidato a intendente el señor Terzich trabajó conmigo en las internas, y después cuando ganamos las internas, hicimos un compromiso. Cuando ganamos las elecciones, Terzich me quiere manejar cómo armar el Gabinete. Me cambia toda la jugada, quería acomodar toda su gente...lo cual obviamente yo no le permití".
"Entonces él se enoja conmigo, se retira, no quiere trabajar más conmigo y ahí empezó un ida y vuelta que yo nunca le contesté. A lo mejor habrá pensado que me iba a manejar la vida. Es un señor que está acostumbrado a eso. Las veces que me encontraba me insultaba...yo nunca le respondía los insultos", agregó.
Interviene en el caso la fiscal Liliana Luppi, quien ya habría hablado con el funcionario municipal.
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